ENTRA EN MI VIDA

La primera vez que leí un libro de Clara Sánchez, fue Ultimas noticias del paraíso (año 2000), y no me llamó mucho la atención, así que cuando leí Lo que esconde tu nombre (2010) no me acordaba de ella y no relacioné un libro con otro ni a la autora con ninguno.

También tengo que decir que ese libro no estaba en mi punto de mira. En ese momento tenía muchos libros donde elegir y creo que si lo hice fue porque, como tantas veces, la portada me llamó la atención. Así que lo cogí y una vez empecé a leerlo, no lo pude soltar hasta terminar. Pero ese libro, como cada uno, es una historia, y lo que quiero decir es que me marcó tanto esa novela, que entonces sí memoricé el nombre de su autora.

Por eso, cuando publicó Entra en mi vida, supe que quería leerlo. Y mucho más cuando leí la sinopsis.

El tema de los niños robados es algo que a pesar de llevar mucho tiempo latente, no es hasta ahora cuando por fin la sociedad ha comenzado a denunciarlo con fuerza y a gritar lo que nadie quiere oír. Y aun así, pienso que un tema tan difícil y repugnante como es el robo de un hijo y el tráfico de un ser humano, no tiene toda la importancia e impacto que debería. Los que no hemos pasado por eso ni conocemos personalmente casos, no tenemos toda la información que tal vez deberíamos, y Entra en mi vida es una forma impactante, bruta y directa de ponernos en situación de lo que durante años ha estado pasando en este país pandereta.

Verónica siente que hay algo que no encaja en su vida. Su familia es normal: padre, madre, hijo, hija. Tiene cuatro abuelos, le va bien en el colegio, tiene amigas... Pero hay algo que no tiene claro si es que sobra o que falta. Y entonces, con diez años, encuentra entre los papeles importantes de sus padres la foto de una niña, cuya existencia comprende que es un secreto y de vital importancia.

Durante años, Verónica calla, escucha y observa. Las actitudes de sus padres, esas palabras que no se dicen pero flotan a la vista, las indirectas, lo que nunca se debió decir y lo que nunca se debió callar terminan por estallar: antes de su nacimiento, nació otra niña de la que sus padres no se han olvidado pero ni ella ni su hermano conocen. Las preguntas comienzan a acumularse en la vida de Verónica, y entonces, cuando su madre cae gravemente enferma, la necesidad de saber se precipita en su vida...

Por otro lado, está Laura, una chica que siempre se ha sentido distinta a su familia, compuesta por ella, su madre y su abuela. Laura tiene la actitud prudente de aquel que sabe que algo no encaja pero es mejor no preguntar: la realidad puede ser más brutal que la mentira. Una vida construida sobre un escenario que parece real pero no es más que un atrezzo que ella se empeña en negar. Y mientras en su mundo comienza a cerrarse la posibilidad de decidir por si misma y vive bajo la sombra y dominio de su abuela, aparece Verónica, una desconocida hasta ahora que va a cambiar de forma irremediable la vida de Laura para siempre...

La variedad de personajes es estupenda. En lo que dura la historia, el lector se sumerge tanto en ella que difícilmente se puede hacer una reflexión de lo que cada uno simboliza. Sin embargo, una vez finalizada la lectura, uno no puede evitar la reflexión y con ella ir encajando las piezas que supone cada personaje en la historia y tal vez, en la vida real.

Están Betty y Daniel, los padres de Verónica, la una retratada como una mujer enferma de los nervios y obsesiva, mientras que él es un hombre sencillo que sólo quiere una vida tranquila y no alimentar los fantasmas de su mujer. Una llena de esperanza, rabia y dolor; el otro queriendo paz y negando evidencias para evitar el dolor.

O Ana, amiga de Betty, que sabe demasiado de la familia, mientras que ellos no saben nada de ella. Una mujer aparentemente perfecta, física y emocionalmente, pero con un secreto que bajo ningún concepto tiene que salir a la luz... Ana es la apariencia, esa maldad escondida, la careta que nadie imagina que puede llevar un ser querido.

Y Greta, la madre totalmente pasota de Laura, que sólo se quiere a si misma y vive por y para su propio ombligo pero a la vera de su madre, Lilí, una mujer que representa el egoísmo y control absoluto sobre la vida de los demás...

"La gente es capaz de todo. Primero por dinero. Después por odio y, finalmente, por amor. Aunque desconfíes, nunca desconfiarás lo suficiente." 

El libro está compuesto por capítulos que son alternando la voz de Laura y Verónica como narradoras, siguiendo siempre la línea temporal. A veces se retrocede a la infancia de cada una donde mediante recuerdos, nos vamos situando en la que ha sido la infancia de cada una y cómo la han vivido. La acción transcurre en Madrid, comenzando en 1982 con el nacimiento de una y terminando la novela más o menos en el año 2001. Y digo terminando la novela porque la historia queda con un final abierto, que no podía haber sido más adecuado.

Lo que he sentido al leer el libro es personal, pero me voy a atrever a generalizar. La sensación es por un lado, desagradable. Leer algo tan duro como el robo de bebés, la pérdida de identidad y el descubrimiento de que una vida está construida sobre una mentira es terrible, sobre todo sabiendo que esa historia la han sufrido, están sufriendo y van a sufrir muchas personas. Clara Sánchez ha sabido transmitir de forma estupenda el dolor, la rabia y la confusión de ambas partes: los padres y los hijos. No solo eso, sino también la situación de quienes les rodean, lo cual es un conjunto como poco, siniestro...

Por otro lado, el libro es una maravilla. La narración es fluida, muy ágil y nada complicada a pesar de haber varios nombres y fechas. Los saltos temporales pasado-presente están perfectamente definidos, al igual que las personalidades de Verónica y Laura, las dos protagonistas. 

En definitiva, es un libro que recomiendo no sólo por su calidad novelística, sino por la temática, algo que todos deberíamos tener presente.

ENTRA EN MI VIDA

-Clara Sánchez-

Ediciones Destino, año 2012

PVP. 20,50€

-Primeras páginas de la novela.

-Web oficial de Clara Sánchez.

-Web oficial de SOS BEBÉS ROBADOS.