sábado, 31 de marzo de 2012

SIN NOTICIAS DE GURB

Supongamos que estás en una reunión y os llega un email. Supongamos que ese email es de ·M· diciendo que te tienes que leer un libro a la de ya. Supongamos que sabes que te juegas el pellejo si no lo haces. Supongamos que ese libro está ambientado (en su mayor parte) en la ciudad en la que vives. Bueno, pues dejemos de suponer porque es lo que ha pasado.
Lo reconozco. Le obligué. A machete, con amenazas entre líneas, sin opción a decir “no”. Y no es que él lo haga porque yo sea peligrosa, que va. Es que ya nos conocemos y sabe que negarse tendría consecuencias catas… eeeh… Que no le cuesta nada hacerme feliz. Pero es que empecé a leerlo y me pareció que Gurb y Koldo se caerían bien...

"Esta divertida novela relata la búsqueda de un extraterrestre que ha
desaparecido, tras adoptar la apariencia de la vocalista Marta
Sánchez, en la jungla urbana barcelonesa. Pero el protagonista de la
narración no es Gurb, sino otro alienígena que sale en pos de él y
cuyo diario constituye el esqueleto de la narración. La verdadera
naturaleza del relato es de carácter satírico: Mendoza convierte esta
Barcelona, a un tiempo cotidiana y absurda, en el escenario de una
carnavalada que revela el verdadero rostro del hombre urbano actual."


·Vale. Hay que tener en cuenta que está escrita hace ya más de veinte años y que está ambientada en el Barna de entonces: preolímpico y patas arriba. Me he divertido pero supongo que el retrato de Barna que presenta me deja un poco descolocado. Quiero decir, conozco esta ciudad ahora y muchas de las referencias las sitúo pero otras me costaba hacerme la imagen. Por ejemplo, en un momento dado hablan de los antros del Moll de la Fusta. Lo he tenido que buscar. Y resulta que paso a menudo por ahí, pero no lo conozco por ese nombre. O cuando habla del que supongo que es el MACBA. Si no conoces la ciudad, perfecto: el libro es ameno, se lee rápido y fácil, te ríes y te lo pasas en grande. Si lo conoces, lo dicho, hay cosas que te extrañarán. 
·Tienes puntazos y muchísima mala leche. Porque, claro, el choque cultural de un extraterrestre con Barna y sus habitantes es brutal, dando a situaciones rocambolescas e historias surrealistas. Y que 20 años después muchas cosas siguen vigentes para esta ciudad tan, vamos a dejarlo en peculiar, tiene mucho mérito. O demérito de Barna.
·Yo he estado un par de veces en Barcelona, pero despistada como soy, no me había fijado en nombres de calles, de plazas, ni nada… Con lo que todo me resultó muy sencillo de imaginar. Pero, al contrario que Koldo, yo no soy de fijarme mucho en las descripciones de las ciudades o las calles. Supongo que como nos motivan distintos tipos de lectura, cada uno se fija en lo que más le interesa, y yo estaba demasiado ocupada en secarme las lágrimas de la risa y seguir leyendo lo que cuenta el Extraterrestre Sin Nombre. Aunque la sinopsis lo resume todo, tengo que añadir que eso es lo que más o menos me explicó la amiga que me recomendó el libro y me dejó un poco confusa. 
·Gurb y el Extraterrestre Sin Nombre llegan a la Tierra a realizar un estudio sobre los humanos. Ambos tienen la capacidad de transformarse en cualquier persona, además de ser elásticos y tener una esperanza de vida de unos 9.000 años. Al aterrizar, Extraterrestre Sin Nombre, que se autoproclama jefe, envía a Gurb a Barcelona con la apariencia de Marta Sánchez. Se comunican telepáticamente, pero en un momento dado, pierden el contacto: Gurb ha desaparecido. Así que al jefe no le queda más remedio que adoptar una forma humana y tirarse de cabeza a la jungla barcelonesa, que como dice Koldo, estaba totalmente desfasada y patas arriba.
·A partir de ahí, y viendo que encontrar a Gurb va a ser bastante más complicado de lo que parecía, el Extreterrestre Sin Nombre decide abrir una cuenta en el banco (con una cantidad de “pesetas veinticinco”) y ponerse bastante cómodo…


·Me ha gustado el formato, que es el de un diario. Cada día se va alargando más. Supongo que mientras se va humanizando el extraterrestre tiende más a enrollarse. Me ha sorprendido ver plasmados conceptos catalanes como "fer dissapte" literalmente al castellano, "hacer sábado", que si no vives aquí no sé si se terminan de entender (y lo que para mí es una broma a otra persona le puede dejar fría).
·El libro está totalmente narrado en primera persona por Extraterrestre Sin nombre. Los párrafos, efectivamente, se van alargando más a medida que transcurre la historia y pasamos del golpe de humor puro y duro a situaciones dominadas por la ironía y lo imposible, que igualmente provocan la risa pero de distinta forma.


·Pero sobre todo me quedo con la tierna historia con la señora Mercedes y el señor Joaquín (los regentes de una taberna al que va el extraterrestre sin nombre), el vicio por los churros del extraterrestre que va en busca de Gurb y su alcoholismo empedernido.
·Esta parte ha sido la que en medio de esa crítica al ser humano capitalista, burgués, pijo y gastador, asoma también el lado tierno y solidario que tenemos con la gente a la que llegamos a querer. Resumiendo: un extraterrestre nos enseña lo mejor y lo peor de lo que es ser humano.
·Respecto a la narración, la novela está escrita en un lenguaje muy cercano y sencillo y se lee increíblemente rápido. Muy recomendable para un momento de bajón o una día con tiempo libre, sin planes a la vista y ganas de reír.


SIN NOTICIAS DE GURB
-Eduardo Mendoza-
Seix Barral, colección Biblioteca Eduardo Mendoza, año 1990
PVP. 12,00€



"08.00 Me naturalizo en un lugar denominado Diagonal-Paseo de Gracia. Soy arrollado por autobús 17 Barceloneta-Vall d'Hebrón. Debo recuperar la cabeza, que ha salido rodando de resultas de la colisión. Operación dificultosa por la afluencia de vehículos.

08.01 Arrollado por un Opel Corsa.

08.02 Arrollado por una furgoneta de reparto.

08.03 Arrollado por un taxi.

08.04 Recupero la cabeza y la lavo en una fuente pública situada a pocos metros del lugar de la colisión. Aprovecho la oportunidad para analizar la composición del agua de la zona: hidrógeno, oxígeno y caca."



·M· y Koldo

jueves, 29 de marzo de 2012

EL TIEMPO QUE NOS UNE

Tengo que confesarlo: tengo una debilidad impresionante por las portadas de Suma de Letras, me fascinan hasta límites insospechados. El aspecto en general de las nuevas ediciones de esa editorial es algo a lo que no puedo resistirme, en comparación por ejemplo de las de Planeta, que la cubierta es monocolor y encima ponen la clásica portada en papel, sujeta por las tapas. Y como maniática que soy, no lo soporto, no me gusta llevar ese papel incómodo y propenso a romperse o doblarse, y siempre lo quito. Total que tampoco me gusta el tacto de las cubiertas desnudas, y no los encuentro cómodos para sujetar.

Suma de Letras es todo lo contrario. Y precisamente por eso, cada vez que mi radar detecta uno de esos libros, me lanzo a por él. Así fue como en la biblioteca encontré el pasado lunes El tiempo que nos une. Cogí el libro por dos tres motivos. El primero, porque me encantó la portada, no voy a mentir. El segundo, porque me interesó el argumento y el tercero porque ya había leído dos libros del autor y ambos me habían gustado: El secreto de los Hoffman y La isla del aire.

Mencía tiene noventa años, y aunque está cansada y la edad no perdona, sigue en guardia, rabiosamente empeñada en velar “por los suyos” a cualquier precio, hasta que el tiempo y las fuerzas se lo permitan. Menorca, Madrid, Barcelona, Copenhague…, ningún lugar es demasiado lejos si hay que acudir en ayuda de la callada Lía para que acepte la muerte de su hija mayor y librarla por fin de la culpa que no la deja vivir, o de la arisca Flavia, para que apueste por su propia felicidad en el otro extremo del mundo y conozca por fin un amor que la haga grande. Nada ni nadie será capaz de poner freno a la inconmensurable Mencía cuando, sacando fuerzas de flaqueza, decida salvar a su nieta Inés de un triste final y la recupere para la vida, ni cuando se empeñe en labrar para Bea y su pequeña Gala un futuro mejor por el que nadie parece apostar.

Hablar de El tiempo que nos une resulta que implica hablar de dos libros, no de uno. Cuando comencé a leerlo, durante las primeras páginas tuve una sensación extraña, como un deja vú… “Pero si yo esto ya lo he leído… ¿pero esto qué es?”. Miré la edición, y no: primera edición noviembre 2011. Imposible, no he leído este libro. Pero conocía la historia, a los personajes… Sabía como lo que iba a pasar a continuación.

Y de pronto, caí. El tiempo que nos une está dividido en capítulos (libro uno, libro dos…) y el primer libro es la novela La isla del Aire, del mismo autor. Es una novela cortísima que justamente compré en Madrid a precio de saldo justo cuando abrí el blog.

La isla del Aire trata de una familia compuesta por mujeres: Mencía, la abuela, Lía y Flavia, sus hijas y Helena, Inés y Bea, las tres hijas de Lía. Viudas, separadas o solteras, el libro gira en torno a un universo femenino en el que el tema principal es las relaciones de estas mujeres entre ellas, siendo caracteres opuestos, y por separado, como unidad. Es una novela muy cortita, en la que se aborda un conflicto familiar con un final abierto.

De este modo, en El tiempo que nos une, el autor ha cogido las partes más importantes y explicativas de La isla del Aire para crear a partir de ahí una novela mucho mas larga, más trabajada y en la que se moja mucho más. Si en el primer libro nos hacemos una idea de cómo son cada una de esas mujeres, en el segundo salimos de dudas y asistimos a un periodo de sus vidas de más o menos tres años.

Mencía tiene 93 años, no se muere, y está viendo como a su alrededor, sus chicas se desmoronan. Sus hijas no son felices, una por toda una vida echada a perder y la rabia que la consume, la otra porque es incapaz de aceptar la ausencia de una de sus hijas. Sus nietas, las que le quedan, no llevan la vida mejor: Inés sufre como madre la grave enfermedad de su hijo, y Bea está totalmente perdida en su propia vida y es incapaz de hacer nada por sí misma.

No pasa nada en concreto y pasan muchas cosas, exactamente lo que es la vida real. Mencía es una vieja metomentodo, rabiosa con la vida, amante de su familia, y dispuesta a todo por solucionar lo que nadie parece ser capaz. Cada capítulo está narrado en primera persona por cada una de las cinco mujeres, siendo siempre una línea hacia delante sin necesidad de retrocesos en el tiempo.

Además, las cinco son mujeres totalmente distintas, con caracteres que no se parecen en nada, y por lo tanto con distintas maneras de enfrentar la vida, la muerte, el dolor, la pérdida, las nuevas llegadas, los amores y la incertidumbre. Eso me ha gustado mucho porque el lector tiene además otros personajes muy bien trabajados y mucho donde elegir a la hora de sentirse identificado.

El libro trata sobre todo de la vida y la muerte. Habla con mucha naturalidad de lo que supone para alguien perder un ser querido, tanto por fallecimiento como porque esa persona haya decidido poner distancia de por medio. Y también habla de la valentía y su importancia, del papel que juega ser valiente a la hora de tomar decisiones en la vida y del papel que juega después ser valiente para enfrentar las consecuencias de las decisiones, cosa que me ha gustado mucho.

Respecto al lenguaje, es muy cercano y está muy bien trabajado, y la narración, como a mi me gusta, ligera y rápida de leer. Atrapa mucho y cuesta soltar el libro, exceptuando ciertos momentos en los que la trama es dura precisamente por las verdades que dice y por lo tanto, hace falta parar para respirar.

Me ha ocurrido que una amiga me vio sacar el libro del bolso y me dijo “Anda, este lo he leído yo hace poco… Es un poco regulero, la verdad, no sé si te va a gustar…”

No sé si es que nuestros gustos son muy opuestos o si es que yo he tenido la ventaja de haber leído antes La isla del Aire y por eso ya me sentía más cerca de esas cinco mujeres. Además me ha fascinado totalmente cómo un hombre ha podido meterse de una forma tan natural en el papel de no una, sino cinco mujeres. Un aplauso para Alejandro...

Por último, y como siempre, en mi opinión, no se lo recomiendo leer a alguien que ha sufrido una pérdida reciente de alguien muy querido. Sí más adelante, pero no es lo más adecuado para alguien en duelo.


EL TIEMPO QUE NOS UNE
-Alejandro Palomas-
Suma de Letras, año 2011
PVP. 20,00€


“El generoso compromiso con la vida de una saga de mujeres inolvidables. Lean a Alejandro Palomas, no se arrepentirán”.
Elsa Punset

Primeras páginas de la novela...




lunes, 26 de marzo de 2012

FLORES EN EL ÁTICO

Había oído hablar varias veces de este libro, pero aunque el título me parece el colmo de la melancolía (y yo soy muy dada al melancolismo), nunca me había molestado en saber nada de él.

La semana pasada, en la página de Facebook del blog, pregunté si alguien podía decirme algo sobre él, y Berta y Esther me lo recomendaron encarecidamente. Así que decidí hacerles caso y esa misma tarde me puse con él. Sencillamente, no pude soltarlo más.

Desde su publicación original Flores en el ático se convirtió en un fulminante bestseller y fue adaptada al cine con gran éxito. Primera entrega de una serie sobrecogedora, esta novela narra la terrible experiencia vivida por cuatro niños que, víctimas inocentes de unas pasiones prohibidas, crecen en un lúgubre encierro, aislados del mundo por una madre cruel...

Flores en el ático comienza cuando el padre de la familia Dollanganger, fallece en un accidente de tráfico, dejando solos y en una pésima situación económica a su viuda y sus cuatro hijos: Christopher, Cathy y los pequeños gemelos Cory y Carrie. Corrine, la madre de los niños, una mujer que se acomodó a no ser nada más que madre y ama de casa, se siente incapaz de sacar a sus hijos adelante, por lo que anuncia a los niños que van a ir a vivir con sus padres, a quienes los niños creían muertos.

Después de un extraño y penoso viaje hasta la mansión de los millonarios abuelos, Corrine encierra a los cuatro niños en una habitación con la excusa de que su padre, moribundo, no puede saber que tiene cuatro nietos, ya que por un misterioso motivo en el que ellos están implicados, desheredó a su hija y ahora necesita ganarse de nuevo su afecto para heredarle. Alegando una muerte próxima, y asegurando a sus hijos que el encierro no durará más de un o dos días, se marcha dejándolos solos.

Pero rápidamente los niños se dan cuenta de que la muerte de su abuelo no va a ser tan pronto como Corrine aseguraba. La abuela, que los detesta, los maltrata física y psicológicamente hasta el extremo, y Corrine, incapaz de hacer ni decir nada, comienza a desapegarse poco a poco de sus hijos.

Mientras tanto, y en busca de algo que les permita sobrevivir al encierro y para distraer a los pequeños gemelos, Chris y Cathy encuentran un pasillo que comunica la habitación con un ático, que hacen de él un sitio más agradable y donde pasan las horas muertas, a la espera de una madre que no parece tener mucha prisa por volver…

“Y lo que estaba cubierto por sábanas para protegerlo me producía escalofríos, porque aquellas cosas me parecían extrañas, fantasmales, fantasmas de muebles susurrando, murmurando. Y no quería oír lo que tenían que decirme”.

Seguir con el argumento, creo que sería desvelarlo totalmente. Mientras duró la lectura, comentando con otras personas que lo estaba leyendo, escuché comentarios como “es muy fuerte”, “me impactó mucho”, “es muy duro de leer”, “igual no te gusta”… La verdad es que todo eso lo único que consiguió fue alimentar mi curiosidad.

A pesar de que la novela resulta claustrofóbica y un tanto angustiante, precisamente por eso me ha parecido muy buena: porque sin una narración agresiva, el lector asiste a un maltrato que de otra forma, no hubiese sido fácil de comprender tan bien.

Me ha fascinado como la autora ha sido capaz de plasmar las angustias de cuatro hermanos como grupo y las de cada uno de forma individual, especialmente en lo que respecta a Chris y Cathy, que sufren el encierro en plena adolescencia y desarrollo sin ninguna información ni ayuda, teniendo además que ejercer de padres de los gemelos y velar por ellos.

Por otro lado, aunque con mucho menos protagonismo, están Corrine y su madre, la primera una mujer débil y egoísta y la segunda una fanática religiosa obsesionada con pillar a sus nietos cometiendo algún pecado carnal para así castigarlos con palizas que considera justas a los ojos de Dios.

En conjunto, me ha parecido una novela muy buena. Es estilo narrativo y la fluidez con la que se lee, además del enganche que tiene, me ha recordado un poco a Kate Morton: ligero, rápido y sencillo de comprender.

Ahora tengo el resto de la saga esperándome, pero antes creo que voy a leer algún otro libro distinto, porque aunque me ha gustado mucho, la historia que se narra es realmente dura y necesito vaciarme de tanta penuria.

¡Una vez más, muchas gracias a Berta Dos y Esther Santiago por convencerme para leerlo!


FLORES EN EL ÁTICO
-V.C. Andrews-
Primera edición Plaza&Janés, año 1979
DeBolsillo, año 2003
PVP. 8,95€



domingo, 25 de marzo de 2012

Fragmento: Alicia en el País de las Maravillas

-¡Curiorífico y rarífico! - exclamó Alicia (que estaba tan sorprendida, que, de momento, no sabía ni siquiera hablar correctamente el idioma) -. ¡Ahora me estoy estirando como el telescopio más grande del mundo! ¡Adiós, pies! - gritó, pues, al mirar hacia abajo y buscar los pies con la mirada, se estaban alejando tan rápidamente, que creía perderlos de vista de un momento a otro -. ¡Pobres piececitos míos! ¡Quién os pondrá ahora los calcetines y los zapatos! ¡Yo, desde luego, no podré hacerlo! ¡Voy a estar demasiado lejos para preocuparme de vosotros! ¡Tendréis que arreglároslas por vuestra cuenta como mejor podáis!...

"Aunque más vale que me ocupe de ellos de alguna manera", pensó Alicia, "no sea que les dé por andar hacia donde yo no quiera. Vamos a ver: les regalaré un par de botas nuevas todas las Navidades".

Y siguió haciendo planes sobre la mejor forma de conseguirlo. "Tendré que mandárselas por correo", pensó, "¡Qué gracioso va a ser mandar regalos a los propios pies! ¡Y no digamos nada en cuando a la dirección!... Al Ilustrísimo Señor Don Pie Derecho de Alicia, en la alfombra de la chimenea, junto al guardafuegos. Con todo el cariño, Alicia".

- ¡Qué tonterías estoy diciendo! (...)


ALICIA EN EL PAÍS DE LAS MARAVILLAS
-Lewis Carroll-



...para ti, que eres único, curiorífico, rarífico y nunca, nunca, nunca pierdes la esperanza. 
(Llu nou) Exou.

sábado, 24 de marzo de 2012

Sorteo Negro sobre blanco

Una vez más, Kayenna en colaboración con la autora Mildre Hernández, sortea cinco ejemplares del libro Una niña estadísticamente feliz.

Para participar, no hay más que pasarse por el blog de Kayenna y echar un vistazo a las bases. Y por si aun no conocéis el libro, aquí podéis leer la maravillosa reseña... 


¡Muchas gracias, Kayenna!


viernes, 23 de marzo de 2012

Fragmento: La sonrisa de las mujeres

El año pasado, en noviembre, un libro me salvó la vida. Sé que suena inverosímil. Algunos considerarán exagerado, o incluso melodramático que diga algo así. Pero eso fue justo lo que ocurrió.

No es que alguien me disparara al corazón y la bala se quedara milagrosamente incrustada en las páginas de una gruesa edición en cuero de los poemas de Baudelaire, como sucede en las películas. Tampoco tengo una vida tan excitante.

No, mi estúpido corazón había resultado herido antes. Un día que parecía ser como otro cualquiera.

(...)

Aquella sería la segunda noche en la que apenas dormí. Pero esta vez no fue un amante infiel lo que me robó el sueño, sino -quién iba a pensarlo de una mujer que era todo menos una apasionada de la lectura- ¡un libro! Un libro que me atrapó desde las primeras frases. Un libro que a ratos era triste y a ratos tan cómico que me hacía reír a carcajadas. Un libro que era delicioso y misterioso a la vez, pues, por muchas novelas que se lean, pocas veces va una a dar con una historia de amor en la que juega un papel importante su propio restaurante y en la que se describe a la protagonista de un modo que una cree estar mirándose en el espejo... ¡en un día que es muy, muy feliz y todo sale bien!


LA SONRISA DE LAS MUJERES
-Nicolas Barreau-

miércoles, 21 de marzo de 2012

UNA SOMBRA EN PEKÍN

Gané este libro en un sorteo que organizó Ediciones Traspiés junto a cinco bloggers, y en mi caso, me dieron el premio Lourdes y Edu, de Libros que voy leyendo.

Es un libro muy cortito, con 77 páginas de novela y otras 7 de ilustraciones de Juan Gonzalo Lerma, y muy buenas en mi opinión.


Siempre en las viejas fábulas seduce la virtud de encarar los asuntos más hondos del alma desde la sencillez de la vida de los animales. Una sombra en Pekín hereda aquella transparencia, la sorpresa y el candor de los antiguos fabulistas para hablar, ahora, de la gran ciudad, de la soledad y del paso del tiempo con personajes de carne y papel que tienen nombres de animal: la tortuga, cuya fortuna arruinó un tiburón, que ama a una rana y desama a una paloma . En la época indefinida donde ocurren los cuentos, en un país —China— tan lejano en los mapas como inmediato en los sentimientos, un anciano afinador de pianos describe con la caligrafía de su presente el vacío que ha sido su vida desde que salió de su pequeña ciudad para emigrar a la metrópoli. Una fábula que recurre a la ambientación más distante para dibujar con mayor exactitud el retrato de nuestro tiempo. 


Cuando leí la sinopsis, y aficionada como soy a la cultura china, creí que el libro serían relatos cortitos de fábulas orientales. Pero me equivoque completamente.

Wu Gui es un anciano que al final de su vida regresa de Pekín al pueblo que lo vio nacer. En un vertedero donde antaño había un prado con árboles frutales, se sienta junto a un piano roto y comienza a escribir en un cuaderno el recuerdo de su vida

Asistimos a la rápida historia de un hombre que siendo niño, aprendió de su padre el oficio de afinador de pianos. Años después llegan al pueblo los pianos eléctricos, el joven se ve en la circunstancia de abandonar de forma triste su pueblo y se marcha a Pekín a continuar con su labor. Pero las cosas en la gran ciudad no son como él había imaginado, y una vez más, ve su ilusión frustrada y comienza a trabajar en una fábrica, donde pasan los años, hasta que termina por volver al pueblo.

La historia se cuenta en saltos temporales. Wu comienza la narración en la actualidad y a medida que llena el cuaderno, va saltando al pasado y volviendo al presente, donde en el mismo vertedero conoce al vigilante, que a cambio de que arregle el piano y toque algo para él, le consiente pasar las noches allí y compartir su comida.

Me ha encantado, porque por increíble que parezca, en las 77 páginas que dura el relato, cabe toda una vida. No sé si es lo que el autor quería transmitir, pero lo que yo he sentido al leerlo ha sido la vida triste y gris de un hombre que elige la comodidad a la lucha. Prefiere acomodarse en una vida simple y sin complicaciones que no le aporte nada, a pelear tanto por algo que quería hacer como por las pocas personas que le rodean y llegan a quererle.

El mensaje me ha gustado porque creo que es precisamente el tipo de cosas que todo ser humano debería evitar. El hombre, a pesar de haber elegido su vida y ser consecuente con sus acciones, me ha provocado lástima y una ligera sensación de malestar hacia la idea de desperdiciar así una vida.

Además, los personajes forman un grupo variopinto en el que cada uno tiene su papel, no sólo en la historia, sino en la vida en general. El autor ha sabido plasmar muy bien diferentes tipos de personas y por tanto, diferentes actitudes ante la vida, siempre en función de nuestra posición y circunstancias.

Al final del libro, las ilustraciones, junto a una nota explicativa, terminan por aclarar algo que el lector no se esperaba, cerrando así un circulo de una forma estimulante y que entonces sí da pie a la fábula.


UNA SOMBRA EN PEKÍN
-José Ángel Cilleruelo-
Ediciones Traspiés (Colección Vagamundos), año 2011
PVP. 12,00€


Web y Blog de Ediciones Traspiés.




Y sin embargo, aunque cada uno trate de escapar
de si mismo como de una prisión que lo encierra en su odio,
hay en el mundo un gran milagro,
yo lo siento: toda vida es vivida.

-Rainer Maria Rilke-
(El libro de la peregrinación)



martes, 20 de marzo de 2012

LAS HORAS DISTANTES

Bueno, sin mucho rodeo... ¿hay alguien que no conozca a Kate Morton? La casa de Riverton fue un éxito en ventas, pero el auténtico boom llegó con El jardín olvidado. Después de esos libros, sus fans esperaban como agua de mayo la próxima novela, y de hecho, ha tenido una gran campaña publicitaria.

En lo que a mi respecta, y estando en minoría, prefiero La casa de Riverton. Lo que disfruté ese libro, lo he disfrutado con muy pocos, y creo que El jardín olvidado, a pesar de ser un buen libro, se parecía demasiado al primero. Sé que los argumentos no tienen nada que ver, pero las historias tienen mucha similitud: en ambas se habla de una familia, una guerra, cartas y secretos.

Así que cuando salió a la venta Las horas distantes, supe que lo leería, pero no me emocionaba. Poco a poco fui perdiendo las ganas, la campaña publicitaria y la histeria de los fans (Kate Morton es para mi un ejemplo de autora con seguidores histéricos detrás) me hizo sospechar que no iba a ser para tanto.

Anoche lo terminé, y me reafirmo en mi sospecha: no es para tanto.

Edie Burchill y su madre nunca han estado lo que se dice unidas. Pero un domingo por la tarde llega a su casa una carta, perdida hace tiempo, con el remite de Milderhurst Castle, en Kent (Inglaterra), y Edie empieza a pensar que la frialdad de su madre oculta un antiguo secreto.
Durante la Segunda Guerra Mundial, la madre de Edie fue evacuada de Londres y acogida por la misteriosa Juniper Blythe en Milderhurst Castle, donde vivía con sus hermanas gemelas y su padre, Raymond, autor del clásico infantil La verdadera historia del Hombre de Barro. El espléndido y enorme castillo le muestra un nuevo mundo en el que descubre la fantasía y el placer de los libros, pero también sus peligros.
Cincuenta años más tarde, cuando Edie busca las respuestas al enigma de su madre, se siente atraída por Milderhurst Castle, donde, ya ancianas, las excéntricas gemelas y Juniper viven todavía.
En el ya ruinoso castillo, Edie investiga el pasado de su madre. Pero hay otros secretos escondidos entre sus muros, y Edie está a punto de averiguar más de lo que esperaba. Lo que realmente sucedió en las horas distantes ha estado aguardando mucho tiempo a que alguien lo desvelara.
Una vez más, nos encontramos ante una familia, una guerra, cartas y secretos. Partimos de la misma base. La sinopsis original del libro, lo explica todo perfectamente: Edie busca respuestas para resolver un misterio ajeno. Y digo ajeno porque el secreto es tanto de su madre como de la familia Blythe. 
Las cosas comienzan cuando la madre de Edie, Meredith, recibe una carta antigua que llevaba décadas perdida en un saco de correos. La carta supone un gran impacto para la mujer que comienza a llorar desconsolada sin ofrecerle mucha información a su hija. Por si no fuera poco el problema de la falta de comunicación que hay entre ellas, Edie se empeña en averiguar el origen de la carta y el malestar de su madre, por supuesto, a espaldas de la misma.
Así llega a Milderhurst Castle, donde comienza a tirar de la cuerda hasta llegar a lugares en los que ni su madre ni las hermanas Blythe quieren entrar. La insistencia y los acontecimientos evocan recuerdos en los personajes del libro que, muy en la línea de Kate Morton, provocan saltos temporales: unos capítulos son narrados en la década de los 20, otros en la de los 40, otros en los 90... 
Por supuesto, esto es una reacción en cadena: un recuerdo evoca otro, un hecho necesita su explicación, esta lleva a otro detalle encadenado a otro recuerdo y vuelta a empezar... 
Esta cadena es precisamente lo que nos lleva a nuevos personajes, pero secundarios, y con ellos nuevas historias que terminan complementando la principal y en definitiva, el misterio que Edie busca resolver.
Todo está perfectamente sincronizado. En mi opinión, es muy difícil desorientarse porque la autora sabe como mantener los acontecimientos en una misma línea sin que el cambio de personaje y de época provoque ninguna confusión en el lector. 
Ataduras familiares, amores que no triunfan, las confusiones que provocan las guerras, recuerdos casi olvidados y recuerdos revividos es lo que, al igual que La casa de Riverton y El jardín olvidado, compone Las horas distantes.
Normalmente suelo dar bastante más información sobre el libro, sus personajes y el desarrollo de la novela, pero con esta me pasan dos cosas. Por un lado, porque como digo más arriba, está todo perfectamente resumido en la sinopsis; y por otro lado porque en esta historia está todo tan enlazado que me resulta casi imposible separar, por lo que dar mucho detalle me parece desvelar demasiado la trama.
La narración y el estilo es lo que más me gusta de la autora. Hace que todo fluya solo, que el lector se deslice entre las líneas y lea sin darse cuenta de que ha podido pasar mucho rato. Es una lectura ágil, sencilla, que atrapa desde la primera línea y la última frase de cada capítulo invita a seguir leyendo sin parar. 
Pero aunque la historia es buena y está muy bien documentada, las descripciones son fantásticas y uno puede imaginárselo todo sin ningún esfuerzo, no me ha motivado especialmente. Porque, como creía, es prácticamente igual que El jardín olvidado
La sensación que me ha transmitido ha sido la que tanto me temía: a causa del bombazo que supuso el anterior libro, se ha aferrado a ese tipo de historia que ahora se vende mucho y ha hecho una copia. Es como si hubiese cambiado el sitio donde transcurre la acción y los nombres de los personajes y hubiese creado una historia prácticamente igual.
El personaje de Edie me recuerda mucho a Casandra (protagonista de El jardín olvidado) que partiendo de una misiva, se lanza a descubrir un secreto que comenzó varias generaciones atrás. Las protagonistas principales son mujeres, otro rasgo en común, y las casas victorianas parecen estar presentes en todas sus historias. Además debo reconocer que Edie me ha caído rematadamente mal.
Por eso, creo que para un nuevo lector es un libro estupendo y con mucho enganche, pero para quien ya ha leído las anteriores obras de la autora, puede resultar bastante predecible. Y cuando un autor me transmite la sensación de que se ha aferrado a una historia concreta para seguir vendiendo (como me ocurre con Katherine Pancol, por ejemplo), termino por desencantarme y aburrirme de lo mismo. 


LAS HORAS DISTANTES
-Kate Morton-
Editorial Suma de Letras, año 2012
PVP. 19,95€



lunes, 19 de marzo de 2012

Sorteo Libros Que Voy Leyendo

Lourdes y Edu vuelven a la carga, esta vez con un sorteo primaveral. Y como siempre, imposible resistirse: los premios son ni más ni menos que un ejemplar de La concubina de Roma (Kate Quinn) y Desayuno en familia (Roger Rossenblat). Yo personalmente, me muero por este último... ¡Así que de cabeza a la piscina!

El plazo es hasta el 22 de abril y la participación es muy sencilla, para ir directos a las bases, ¡clik aquí!


Mucha suerte a todos, ¡¡y muchísimas gracias a Lourdes y Edu!!



domingo, 18 de marzo de 2012

WILT

Hace poco, se me ocurrió liar a Koldo en una reseña doble. Tenemos gustos tan opuestos que pensé lo curioso que sería leer juntos un libro y reseñarlo. Busqué algo que pudiésemos leer ambos sin darnos cabezazos contra la pared... Y entonces apareció Wilt.

La novela se centra en el personaje que le da título: Henry Wilt, un profesor desmoralizado y minusvalorado que enseña literatura a alumnos desmotivados en una "Escuela de Artes y Oficios" del sur de Inglaterra. Humillado y acosado por su mujer Eva, físicamente poderosa pero mentalmente inmadura, Henry Wilt fantasea con la posibilidad de asesinarla mientras pasea a su perro. Cuando Eva conoce al matrimonio Pringsheim, una pareja extravagante de estadounidenses, Wilt se verá envuelto en una farsa policiaca que le enfrenta al comisario Flint, convencido de que efectivamente ha asesinado a su esposa, arrojándola entre los cimientos de la ampliación de su escuela. 

¿Cómo terminas leyendo una novela inglesa de 1976? Pues por culpa de ·M· y que conozca mi retorcida mente. No me puedes decir "mira el argumento de este libro", aparezcan las palabras "desmoralizado", "humillado" y "fantasea con asesinar a su mujer" y pretender que no lo lea. Es materialmente imposible.
Por mi parte, no lo pude evitar. Cuando leí el argumento, automáticamente pensé en Koldo y en las barbaridades que podían llegar a salir entre nosotros después de leer semejante barbaridad. No es el tipo de libro que me gusta, pero tenía un nosequé… Que dijimos: “Si lo leemos a cuatro ojos, lo reseñamos a cuatro manos”.

A ver, como le he dicho a ·M· mientras comentábamos dónde íbamos en el libro "estoy enganchado a esta mierda sórdida y sin pies ni cabezas". Que nadie se espere un libro agradable y fino. Ni por asomo. Es sórdido, explícito y, en ciertos puntos, aberrante. Pero me lo he pasado como un puerco en un barrizal. Seguramente porque muchas partes me han parecido estar viendo una película de los hermanos Coen, que son mi debilidad.
Es una burrada, así, hablando en plata. Yo me he quedado alucinada, porque nunca había leído nada así. A ver, sé que hay quien escribe mezclando experiencia personal, ironía, mala leche y humor negro, ¿¿pero esto?? Esto es fuera de serie… Llega a ser, digamos… Desagradablemente gracioso. Algo así.

Al principio no enganchaba ni con el prota, Wilt, y por mí me los cargaba a todos: a Wilt, a su mujer Eva, a la amiga de ésta Sally, a los amigos de Sally, a la mitad de los compañeros de trabajo de Wilt y a sus alumnos. Menuda panda de gente insufrible, insoportable y petulante: Wilt un sinsangre que tiene escarcha por las venas; Eva una imbécil integral que da más vueltas que una veleta; Sally una petulante mentirosa manipuladora que ni sabe lo que dice; los amigos de Sally una panda de pseudointelectualoides que no tienen dónde caerse muertos; los compañeros de Wilt unos malabaristas de la palabra que no dicen nada, y los alumnos de Wilt, en fin…
A mi, por el contrario, me podía la curiosidad. El principio del libro es el clásico en el que pasas las páginas, lees, lees, lees… Y nunca pasa nada. Por si eso fuera poco, comienzan a usar frases extrañas y los personajes son como salidos de un circo extraterrestre, no hay ni uno normal. NI UNO. O tal vez todos son normales y yo no he tenido la oportunidad de conocer gente tan radical… Coincido con Koldo en que los personajes son una panda de pseudointelectuales que no hacen más que soltar filosofía barata y tienen diálogos totalmente absurdos. Total que según iba leyendo, me sentía tan confusa que no sabía si reír o llorar.

Sin embargo, a partir de la fiesta en la casa de los Pringsheim le he ido cogiendo cariño a Wilt. Luego con la muñeca hinchable unos puntazos de flipar (o lo de "nene pene") y luego ya con su actitud con la policía y la que las lía no puedo más que quitarme el sombrero y hacer reverencias. Esto es una progresión en toda regla de un personaje.
Aclaración: los Pringsheim son Sally y Geskel, el matrimonio con el que Eva hace amistad y que terminan por destrozar temporalmente la vida a Wilt. También debo decir que Wilt es un tío tan sumamente pringado, que en lugar de arreglar el desaguisado, lo único que consigue es hundirse más a sí mismo y a su propia reputación. El desarrollo y desenlace van unidos a la muñeca hinchable: Sally se las apaña para colocársela a Wilt en la entrepierna y a partir de ahí, todo gira alrededor de la muñeca, Wilt, su entrepierna y la desaparición de Eva. Todo sumamente rocambolesco, patético y absurdo.  (“Nene pene”, “Nena globos” y otros apodos que pone Sally son lo que más me ha hecho reír...)

¿Lo malo? No me ha gustado la forma en la que está escrita. Me parece muy confuso enlazar párrafos interminables sin apenas puntos (leer este tipo de párrafos es insufrible) con diálogos rápidos. Son cambios de forma narrativa y de ritmo que a mí me han perturbado.
Totalmente de acuerdo. El lector puede saltarse dos páginas y no se ha perdido nada. Además, hay un batiburrillo de nombres entre los compañeros de trabajo de Wilt, que en honor a la verdad, no he conseguido terminar de situar por ningún lado. Ya no sé quien sube, quien baja, quien es el vecino y quién es el perro. (Ahora que lo pienso, durante todo el libro Wilt apenas pisa su casa ¿¿cómo se mantiene el perro a si mismo?? Fascinante…)

Es un libro surrealista, con mucha mala leche inglesa para criticar el snobismo social y la palabrería hueca de los pseudointelectuales. A mí, desde luego, me ha entretenido y he soltado mis carcajadas con algunos comentarios y situaciones. Lo dicho, una mierda sórdida y divertida.
Es algo distinto a lo que seguramente muchos estamos acostumbrados a leer. Entretenido, sin duda, pero a mi tanta crítica y queja social termina por cargarme, y la verdad es que tenía ganas de acabar el libro. Eso sí, es muy curioso de leer, y de todos modos la lectura es bastante rápida.


WILT
-Tom Sharpe-
19ª Edición de Anagrama, año 2009 (original del año 1976)
PVP. 9,50€


·M· & Koldo