jueves, 21 de junio de 2012

Fragmento: La luz en casa de los demás

(...) 

Por eso te escribo.

Porque no consigo pensar en nada más que en ti.

Y porque son tantas las cosas que me gustaría darte, desde este mismo momento hasta siempre, y tengo tanto miedo de no ser capaz que, al menos, si algún día lees esta carta, sabrás que lo habré intentado con todas, todas, todas mis fuerzas.

Me gustaría que estuvieses aquí conmigo ahora, pero eso ya te lo he dicho.

(...)

Me gustaría, me gustaría, me gustaría.

Me gustaría haber estudiado un poco mejor mi lengua y haber leído muchos libros bonitos para escribirte una carta con las palabras más hermosas del mundo: pero nunca me gustó mucho el colegio. (...) Pero una chica a la que conocí gracias a este trabajo, que se llama Lidia, me dijo una vez una cosa que me dio que pensar: <<Cuanto mejor sabes utilizar las palabras, en lugar de acercarte más, más te alejas de lo que quieres expresar de verdad.>> Así que, ¿sabes lo que te digo? ¡Me alegro de no saber escribir bien para decirte todo lo que me gustaría!

Me gustaría, me gustaría, me gustaría.

Darte todo el chocolate que quieras sin que engordes (está riquísimo, mi preferido es el que lleva leche).

Que si tus compañeros de clase se burlan de ti por la razón que sea, pienses que los que se equivocan son ellos, no tú.

(...)


LA LUZ EN CASA DE LOS DEMÁS
-Chiara Gamberale-

7 comentarios:

  1. ¡Qué bonitos párrafos has elegido!

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  2. Precioso fragmento.
    Me gusta sobre todo el final.
    Si se burlan de ti los que se equivocan son ellos, no tú.
    Palabras muy sabias.
    Besitos.

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  3. Me ha encantado el fragmento, sencillamente precioso.

    Un beso shakiano!!

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  4. Muy bonito este fragmento que nos has dejado

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  5. Me ha encantado, me has dejado con más ganas de leer el libro:)
    1beso

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Whoever you are, now I place my hand upon you, that you be my poem...

(Walt Whitman, 1855)