sábado, 10 de marzo de 2012

Cosas que no soporto

A riesgo de que alguien se de por aludido o se sienta ofendido, me ha apetecido exponer un tema que no soporto: los fans desconstrolados.

Últimamente he visto en algunas redes sociales una histeria colectiva en torno ciertos autores, especialmente a un par en concreto. Los fans crean las páginas, grupos o perfiles, según la red, y comparten noticias y organizan sorteos de libros de dichos autores, cosa que me parece realmente estupenda. Es una forma de potenciar la lectura, atraer nuevos fans, propulsar las ventas y darle fama al escritor/a. Los seguidores toman parte en la acción, se comprometen, publican reseñas y las linkean, todo genial.

El problema, a mi juicio, viene cuando muchas de esas personas no ven la línea que separa ser un admirador de ser un histérico, o al menos en la percepción que yo tengo del mundo.

Me explico. A mi por ejemplo, me gusta mucho Marian Keyes, y siempre que publica un libro, independientemente de que el anterior me haya gustado más o menos, lo compro. Si veo una noticia de esa autora, la leo gustosa, si en un foro o red social viese una página suya (oficial o no), probablemente participaría de vez en cuando a la hora de comentar libros. Si hubiese una presentación de un libro suyo en esta zona (vale, esto es prácticamente imposible, pero es un suponer), iría muy contenta. 

Pero lo que no puedo entender ni mucho menos aceptar es que alguien rebase eso y se obsesione con el autor en sí. De cada artista, lo que nos gusta es su obra. A mi me gustan los libros de Marian, ¿qué me importa a mi si vive en un 3º piso o si le gusta desayunar tortilla de patatas? ¿Qué me aporta saber si tiene mascotas, si se pinta las uñas y qué opina de los diseños de Galliano? La vida personal del autor no es lo que nos tiene que llegar, sino su creación literaria. 

Si la cosa va de sexos, sigo teniendo argumento: me gusta Lenny Kravitz. Me gusta su música, y me parece el tío más sexy del planeta. Cuando me apetece, escucho sus canciones. Me agrada ver fotos suyas, me gusta leer que saca disco nuevo, y si pudiese ir a algún concierto, iría. Pero no me interesa con quien se acuesta, ni si le gusta el arte abstracto o es un fanático religioso. No tengo ni idea de cuántos años tiene ni dónde vive cuando no está de gira. ¡Es que no me aporta nada! 

Por tanto, supera mi paciencia leer como muchos fans buscan y publican fotos de dichos autores paseando al perro, haciendo la compra, enumerando los nombres y la edad de sus hijos, queriendo organizar quedadas con ellos para pasar el día y sacarse mil fotos. Decir que haberles visto de lejos o haberse sacado una foto con el móvil es lo mejor que les ha pasado en la vida, esos llantos histéricos y el drama épico en el que se convierte no haber conseguido un libro firmado.

Este fenomeno fan no es solo con los autores, sino con todos los artistas. Puedo comprenderlo si hablamos de adolescentes (aunque ese follón que montan las niñas con Justin Bieber nunca lo he entendido), pero no puedo aceptarlo con personas adultas. Músicos, cantantes, futbolistas... ¿De verdad están persiguiendo fotografiarse con su talento, o con sus culos?

Estos circos organizados me han llevado a darme de baja o borrarme de ciertos grupos y páginas o abandonar perfiles. Lo que yo creía que sería una especie de lugar de encuentro entre seguidores para hablar sobre los libros, debatir y comentar, se ha convertido en un espectáculo ambulante en el que el autor/a se ha transformado en el mono de feria. 

Y a mi nunca me han gustado los circos.




16 comentarios:

  1. Bueno, vivimos en una sociedad donde todo es inmediato, rápido, hay hiperinformación y, siendo sinceros, cada vez más infantil. Le damos más importancia al contenedor que al contenido, vivimos de la imagen no de lo que hay detrás, tienen más importancia las anécdotas que los hechos. Da igual la vacuidad si es bonito.
    Y el fenómeno fan no es más que e reflejo de esto. A mí me pasa cuando voy a los conciertos de Quique González. Cada vez hay más fans que gente que va a escuchar sus conciertos. Pero, bueno, me limito a disfrutar del concierto e intentar evitar escuchar comentarios pueriles o la pleyade de móviles que se ven. Es lo que nos ha tocado vivir.

    ResponderEliminar
  2. Justo... Me harta que se indague en la vida privada de un artista cuando eso no es lo que en un principio nos ha llenado, sino sus creaciones. Y luego nos olvidamos de eso y le idealizamos de la forma más absurda posible.

    Tener mi propio blog donde hablar DE LIBROS me hace sentirme aliviada, al menos aquí esa histeria no tiene cábida.

    ResponderEliminar
  3. Bueno... hasta que la gente se olvide de tus reseñas y le empiece a interesar más saber el número de pie que calzas o el último modelito que te has comprado...

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Me gusta tu blog y cómo escribes. ¿Qué sombra de ojos utilizas? ¿Te gustan las hamburguesas? ¿Cuál es tu color favorito? ¿A dónde irías de vacaciones?

      Eliminar
  4. Yo aún no me he tropezado con la histeria fan en lo referente a libros (más allá de los fenómenos que han generado ciertas películas basadas en novelas), pero comparto tu opinión. En mi etapa "teenager" fui talifán de los BackStreetBoys pero, una vez que hizo presencia cierta madurez mental comprendí que los fanatismos nunca son buenos; una cosa es admirar a un autor, cantante, actor, deportista, etc., y otra es que tu vida dependa de averiguar cosas de esa persona... Supongo que hay gente que intenta llenar vacíos a través de este tipo de actitudes... Muy buena reflexión,1beso!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Tizire! yo también era fan de los BSB, ¡cantidad de horas invertidas en encontrar la posición perfecta de los posters de la Super Pop! ;) Yo creo que terminas hasta las narices de tu propio frikismo, pero por lo que veo hay quien en vez de frenarlo, lo lleva a más...
      Mua!

      Eliminar
  5. Dentro de poco te empezaremos a preguntar por tu color favorito, en qué piso vives, y demás...

    comparto contigo esta impresión, hay una línea de fanatismo que se sobrepasa demasiado fácilmente. Poco me interesa de un autor sus manías, sus rarezas u otras cosas... lo que me interesa es su trabajo

    ResponderEliminar
  6. jeje no sé en qué páginas habrás caído, pero la verdad es que no conozco este tipo de fenómeno fan de autores de libros (gracias a dios!).
    En fin, hay gente que lleva sus gustos al extremo, pero supongo que será una etapa adolescente y ya se les pasará, no?

    ResponderEliminar
  7. Totalmente de acuerdo, aunque en lo referente a escritores todavía no me encontrado con este fanatismo.
    Besines,

    ResponderEliminar
  8. Totalmente de acuerdo contigo. En lo referente a escritores todavía no me he encontrado con este "fanatismo".
    Besos,

    ResponderEliminar
  9. Coincido contigo, es más, me alegra no ser la única que mira asustada cada vez que alguien dice MOCCIIIIIIIAAAAAAAAAAAAAA jajajaja
    Nunca he sido de histerias y no por eso me gustan menos las cosas.
    Besos

    ResponderEliminar
  10. Joe...la verdad es que no he encontrado de esas páginas pero porque acabo de empezar hace tres semanas en facebook...pero dame tiempo que seguro que me encuentro jaja.
    Pues hombre, yo opino más o menos como tu, que te guste algún famoso por lo que ha hecho, que estés interesada en si saca novedades etc...perfecto pero llegar a esos límites que pones...hombre, me parece exagerado. Pero quizás sea porque nunca he sido mm digamos adoradora de ídolos ni de peke...he tenido mis favoritos pero ya.
    Interesante entrada
    un saludo!

    ResponderEliminar
  11. Coincido contigo. Nunca me ha interesado la vida privada de nadie, cuanto menos de escritores o artistas en general. También huyo de ese tipo de noticias y es posible, que por ello, nunca me ha venido ningún fanático a convencerme.

    ¡Paciencia!

    Un beso.

    ResponderEliminar
  12. Me encantó. El problema quizás radica en lo superficial que es la sociedad, y en el poco criterio que tiene mucha gente.

    Apreciar el arte creado por los artistas parece que hubiera quedado en un segundo plano... son las consecuencias de la ilusoria fama supongo.

    Muchos saludos amiga.

    ResponderEliminar
  13. Estoy totalmente de acuerdo contigo, una cosa ser fan y es perder la cordura por un famoso, ya sea escritor, músico, actor/actriz...
    Algunas personas no sabe separar la fina línea de ser fans por algo que hacen que te gusta a obsesionarse.

    Y como tu, tampoco entiendo todo ese lío que han montado por Justin Bieber (no sé si está bien escrito).

    Besitos

    ResponderEliminar

Whoever you are, now I place my hand upon you, that you be my poem...

(Walt Whitman, 1855)